No han sido pocos los deportistas de nuestra institución que han exportado su talento. Ya sea por motivos estrictamente deportivos o por tener que emigrar por cuestiones de estudio o trabajo. Desde siempre ha habido deportistas de nuestro querido Universitario “desparramados por el mundo”. En este caso vamos a hablar de Gina Rioboldi, una gran jugadora de Hockey, que anda por Rennes y muestra su magia por esos rincones de Francia. Así es que, en la página de CPB hay una hermosa nota sobre la querida Gina que reproducimos. Pero, en primer término y a modo de presentación de nuestra jugadora viajera, hemos pedido a Luciana “Lula” Cerruti, gran jugadora de nuestro Club, que nos ofrezca una semblanza de nuestra querida Gina Riboldi.

“A Gina la conocí a los 12 años, cuando ella comenzó a jugar en Uni. Al principio no jugábamos juntas, estábamos en equipos diferentes, pero después el Hockey nos fue encontrando en los mismos equipos. Nos fuimos conociendo y nos hicimos amigas, sosteniendo esa amistad hasta el día de hoy a pesar de estar a más de 10.000 km. de distancia. Diría que el Hockey nos fue encontrando así como regalándonos muchos momentos, desde adentro de la cancha, en los entrenamientos así como en partidos y torneos. También el Hockey fue encontrándonos en viajes deportivos y viajes de vacaciones con amigas. O sea que con Gina hemos pasado buenos momentos dentro y fuera de la cancha. En Gina, desde el punto de vista personal, quisiera destacar su humor y con ese toque particular que solo ella tiene. Realmente me resulta muy graciosa. Y como persona, diría que tiene algunas características que se ponen de manifiesto en ella como deportista, como jugadora: explosiva, decidida y con los objetivos claros. Gina es una buena amiga.”

Este podría haber sido el título de un nuevo opus de Obélix y Astérix, pero aún mejor, aquí hay una presentación de nuestra (única) jugadora mayor después de una temporada Covid en el club: Gina. Su talento es igual a su hermosa integración en el club.

“Mi nombre es Gina Riboldi, tengo 29 años y nací en Rosario, Argentina. Actualmente vivo en Rennes, tengo un título de ingeniero agrónomo y trabajo en la Cámara de Agricultura de Bretaña.

Comencé el hockey a los 12 años en el Club Universitario de Rosario y fue sin parar hasta los 27 años que decidí venir a Francia para terminar mis estudios y trabajar.

El hockey me acompañó a lo largo de mi vida, el club, los entrenadores y mis amigas fueron mi segunda familia y con ellos viví mis mejores recuerdos. Jugué en canchas de césped real hasta el 2008: con mucho esfuerzo conseguimos nuestra primera cancha sintética, esto nos permitió progresar mucho y en 2011 fuimos campeonas del torneo local de Rosario discutiendo entre 12 equipos de élite de mi ciudad. A nivel nacional fue más difícil para nosotros, jugábamos contra los equipos de Buenos Aires donde muchas de las jugadoras son profesionales, recuerdo haber jugado contra Luciana Aymar y haber perdido 6-0, todavía luchábamos por no bajar de categoría. En 2013 después de la retirada de Buenos Aires del Torneo Nacional, tuvimos suerte y fuimos campeonas nacionales, título que ensayamos en 2015.

Vine a Francia en 2016 por un año de Erasmus como parte de mis estudios de ingeniería agrónoma, pasé un año en Angers donde jugué para el SCO. La vida en Francia me gustó y quería volver, así que tomé la decisión de terminar en Rennes en 2019. Me puse en contacto con el equipo de hockey de Rennes donde fueron muy acogedores pero con el mismo bemol que en Angers: no hay chicas. El hockey en Francia es principalmente masculino, mientras que en mi casa es todo lo contrario! El ejemplo de mi club: tenemos 3 líneas completas de chicas (élite, b, c) contra uno de los chicos, y hay muchos clubes que no tienen equipo masculino. En este sentido, el hockey femenino es muy competitivo, entrenamos 3 veces a la semana (física, musculación y juego) y jugamos los sábados ¡con un montón de público! Nos tomamos el deporte muy en serio, nos comprometimos con el equipo, así que no hay excusas, hay que saber organizarse con los estudios, amigos y familiares. Personalmente, siempre he superado mis exámenes de la universidad el día después de entrenar, es una forma de relajarme.

Una gran diferencia aquí es que los jóvenes se mueven mucho desde la secundaria y eso dificulta la continuidad de los equipos. En Argentina existen 3 grandes ciudades después de Buenos Aires: Córdoba, Mendoza y Rosario. Esta concentración de población facilita la continuidad de los equipos y hace que todos los jóvenes de ciudades y pueblos vecinas vengan a jugar a nuestros clubes.

No todo es nostalgia, por supuesto, tuve la suerte de encontrar el CPB de Rennes que me abrió los brazos, me hice un lugar en el equipo y siempre me divierto tanto como en casa. Chica o chico lo importante es amar el hockey y poder practicarlo.”